La película gira alrededor de un matrimonio de profesionales que viven en un fabuloso apartamento de un barrio exclusivo de Nueva York. Tienen una hija, unos trabajos que les permiten vivir a lo grande pero no ver a la pequeña y una niñera cuya familia e hijos malviven en Filipinas.
En el centro de la película se encuentra la soledad y la indefensión de los niños: niños filipinos que tienen lejos a su madre, cuidando de otra niña en Nueva York casi abandonada por las jornadas laborales maratonianas de sus padres. Niñas en Tailandia que se venden a profesionales estadounidenses y que tienen a su vez más niños, que, por supuesto, tienen lejos a sus madres.
Para saber más:
Vivo en Madrid y en el parque donde llevo a mi hijo casi todas las cuidadoras son latinoamericanas. Sus historias son desgarradoras, y lo peor es que sus empleadores ni las conocen (ojos que no ven, supongo, corazón que no siente). No me pierdo esta película.
Azul